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Leñadores avasallaron sin piedad a los industrialistas con un aterrador despliegue ofensivo

Las Tunas- A fuerza de batazos, Las Tunas consumó la proeza y clasificó por primera vez en la historia a la final del Campeonato cubano de béisbol, tras arrollar hoy por 10-0 a Industriales en el séptimo partido de la semifinal, informa el periódico 26.
Los Leñadores avasallaron sin piedad a los industrialistas con un aterrador despliegue ofensivo, inspirados en la figura del receptor Yosvani Alarcón, quien ligó par de sencillos, un doblete y un cuadrangular en cuatro turnos, jornada perfecta, con tres impulsadas y dos anotadas.
Alarcón, el mejor artillero del conjunto oriental, había llegado a este trascendental partido con porcentaje ofensivo de .200 en la postemporada, antes de renacer este miércoles y marcar la diferencia desde el cajón de bateo.
Impecable resultó también la faena del lanzador Luis Ángel Gómez, por quien apostó con fuerza el manager tunero, Pablo Civil, como su arma secreta para el séptimo choque, pues el zurdo no había abierto ningún partido desde hacía varias semanas, por lesión, aunque presumía del segundo mejor promedio de carreras limpias de la temporada regular.
Gómez contuvo a placer a la toletería de Industriales durantes siete entradas completas, en las que admitió apenas cinco hits y no le marcaron carreras. Una lechada de altos quilates ante el equipo con más títulos en el béisbol cubano (12).
Los tuneros pusieron a moler su maquinaria desde bien temprano y desde el tercer inning ya mandaban en el partido, al fabricar par de carreras después de dos outs, remolcadas por Alarcón con sencillo a la pradera central.
Una entrada más tarde volvieron a pisar dos veces el plato, anotaciones que fueron sucias a la cuenta del derecho de Industriales Freddy Asiel Álvarez, a la postre el perdedor del encuentro, muy mal defendido por sus compañeros.
Con el 4-0 en el pizarrón, todo era júbilo en las gradas del estadio Julio Antonio Mella de Las Tunas, repleto hasta la bandera por más de 15 mil fanáticos.
Entonces llegó la puntilla.
En el cierre del quinto capítulo, los leñadores se soltaron a batear y no pararon hasta erigir un robusto ramillete de cuatro carreras, en el que influyeron sendos cuadrangulares por el jardín central de Alarcón y Rafael Viñales, otro que resurgió en este séptimo partido de la serie, tras naufragar en los choques anteriores.
A partir de ese momento todo era cuestión de tiempo; Las Tunas ponía los dos pies en la gran final por primera vez en la historia, pero aun tenía la posibilidad de propinarle el fuera de combate (KO) a Industriales.
En el final del sexto, los tuneros marcaron una carrera al ligar doblete de Alarcón con sencillo impulsor de Alexander Ayala y se pusieron a solo una anotación de la letal diferencia de 10.
Y en el séptimo episodio llegó la sentencia definitiva, el KO con lechada incluida.
Ahí, los leñadores marcaron la carrera que necesitaban para sellar el fuera de combate por 10-0 gracias al segundo error en el partido del veterano inicialista de Industriales Alexander Malleta, quien cumplirá 41 años dentro de un mes.
Los tuneros ganaron los partidos uno (9-7), cuatro (6-3), seis (6-3) y siete del match, mientras los azules de La Habana se impusieron en los cotejos dos (12-5), tres (4-0) y cinco (4-2).
La remontada de los leñadores será recordada por muchos años, pues llegaron a sus predios del Mella con la estricta obligación de ganar los partidos seis y siete, y lo consiguieron.
tunas-pelota-final2El estadio Julio A. Mella estalló de alegría. Foto: Rey LópezLuego de la victoria de este miércoles, Las Tunas enfrentará en la gran final a Granma, vigente monarca nacional.
Los leñadores ejercerán de locales en los dos primeros partidos de esa serie por la corona, pactada al mejor de siete.
Vale recordar que el equipo de Civil implantó récord de victorias para la organización en la temporada regular, con 59, una faena refrendada ahora de manera brillante con la clasificación a la finalísima.
El ganador de la final representará a Cuba en la Serie del Caribe, prevista del 2 al 8 de febrero en la ciudad mexicana de Jalisco.

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