Revisando álbumes del Puente.
El epíteto de Villa Azul, que también identifica a nuestro carismático pueblo, debutó motivado quizás por la azulada tonalidad de su mar y de su cielo. El primero en emplearlo fue el periodista Manuel García Ayala, quien le dio vida en un poema en los años 20 del siglo pasado. El apelativo ganó tanto el beneplácito del público que los comerciantes lo adoptaron como eslogan.
En las décadas iniciales de la propia centuria, otro periodista y poeta se encargó de añadirle lirismo y sugerencia: el canario Manuel Martínez de las Casas, director del semanario El localista, quien en versos de su autoría se refirió a la localidad como a la Villa Azul de los Molinos, en virtud del gran número de esos aparatos de viento que funcionaban en la comarca.
la villa azul de los molinos ,,linda ,,sin embargo queda pendiente el rescate de los molinos
ResponderEliminarMi pueblo lindo, si sera bonito rescatar algunos molinos tarea pendiente de propietaria con ayuda de las autoridades y organismos, al menos una restauración parcial que los devuelva a la vista de las personas, saludos de tony desde Brasil.
ResponderEliminarMil amores de mi corazon para todos los puertopadrenses de mi "Villa Azul de los Molinos "...Desde Orlando ...Florida, M.Aileam Liranza, la hija del gran poeta Erquides Liranza ...
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