Repasando sobre el puente: Pequeños negocios
Este reportaje lo dedico a un amigo mío que vendió pizzas en las calles de Puerto Padre, con una jaba de yarey. Nunca olvida aquella pena que sintió cuando salió a vender sus primeras 7 pizzas, como no olvida que después la pena se convirtió en orgullo pues su producto, aunque ilegal en ese entonces, llegó a ser el preferido por muchos aquí, en La Villa Azul. No menciono su nombre porque como él me dijo alguna vez le gusta pasar inadvertido, y es que tengo un amigo con muchos valores y uno de ellos es la sencillez.
Hoy en Puerto Padre hay varios negocios donde se vende pizzas, pero en la calle, Jesús Menéndez, número 64, a un costado del parque, José Martí y de la Iglesia Católica, está la "Casa Nouva", "La nueva casa de la comida italiana", en La Villa Azul.
La titular del negocio, Dorka Pérez Bermúdez, accedió a dialogar con Un Puente desde Puerto Padre, sobre este establecimiento privado que nació el 13 de julio de 2013 y que emplea, además, a 5 puertopadrenses que ejercen como ayudantes y se desempeñan como meseros y elaboradores.
Dorka es optimista sobre esta nueva forma de gestión e indica que los fines de semana y días festivos es cuando más se incrementan las ventas.
La mayor dificultad es el abastecimiento de materia prima y asegura que en Puerto Padre casi nunca encuentran lo que necesitan, por ejemplo, la Vita Nova o el puré, la mayor parte de las veces tienen que gestionarlo en Holguín o en Las Tunas, lo que encarece los costos.
También considera la titular de la Casa Nouva, de la Villa Azul, Dorka Pérez Bermúdez ( en la galería es la que está en la mesa rodeada de papeles) que aún son excesivamente altos los impuestos, más si se tiene en cuenta lo costoso de las materias primas, al no existir un mercado mayorista donde pueden proveerse de lo necesario.
No obstante, Dorka y los empleados con quienes conversó Un Puente desde Puerto Padre, están satisfechos con su negocio y aseguran que desde que abrieron, mes por mes, han tenido ganancias que le permiten cumplir con el fisco, mantener el establecimiento y pagar a los empleados, sin dificultades.
Lo cierto es que mucha gente en Puerto Padre habla de las pizzas de la Casa Nouva, aunque una de ellas, la más barata valga 15 pesos y la más cara la de atún, hasta 35. Está claro, entonces, que la pizzería no es para la mayoría, pero ya es un paso en los cambios que emprende el país en pos de un nuevo modelo económico.
Me gusto las dos primeras veces, pero como dice la dueña los insumos son caros y se adquieren lejos, luego la calidad del puré disminuyo, pero seguían siendo buenas, espero puedan encontrar los productos de calidad y aunque cuesten caro, tienen buena proporción y buena elaboración, es una opción buena en Puerto Padre. Un saludo desde Brasil, tony.
ResponderEliminarMuy buena atencion recibi las ocasiones que los visité...y la calidad aunque no excelente si estaba aceptable acorde a las condiciones que se mencioan en el articulo..Saludos desde Nicaragua !!
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